El arte de Nelson Román no solo se admira, se experimenta. Este maestro ecuatoriano, nacido en Latacunga, ha dedicado más de seis décadas a la pintura, el grabado y la escultura, dejando un legado que fusiona lo mágico, lo sacro y la naturaleza. Sus obras, habitadas por caballos galopantes, jaguares penetrantes, serpientes sinuosas y figuras humanas enérgicas, son un canto visual a la vida y a la esencia de las culturas andinas. Su característico “Azul Román” y los intensos rojos que impregnan su paleta evocan una conexión vibrante con la espiritualidad ancestral y la fuerza de la tierra.
El pasado 21 de diciembre, tuve el privilegio de conversar con el maestro Román en un encuentro que trascendió el arte para sumergirse en la visión de un futuro donde la cultura, la ciencia y la innovación convergen. La conversación giró en torno a su obra, sus próximas exposiciones y el ambicioso proyecto Tilipulo, una iniciativa que busca transformar la antigua hacienda de Latacunga en un centro cultural y científico de referencia.
Tilipulo es un proyecto liderado por la Fundación Innovaciencia, en alianza con el GAD Cantonal, que busca dotar a la ciudad de Latacunga de un espacio donde el arte, la investigación y la educación se entrelacen. La propuesta incluye exposiciones permanentes, laboratorios de investigación científica y espacios para el aprendizaje en diversas disciplinas. La financiación del proyecto será respaldada por el Instituto Superior Tecnológico Universitario Innovatech, que aportará un porcentaje de sus ingresos para este propósito.
Nelson Román, con su energía visionaria, describió este centro no solo como un espacio cultural, sino como un epicentro donde la inteligencia artificial y las ciencias avanzadas se imbriquen con el arte y la historia, proyectando a Cotopaxi hacia un futuro de innovación. Con palabras llenas de esperanza, auguró éxitos para la Fundación Innovaciencia, destacando que estos esfuerzos serán un motor para el desarrollo de la provincia.
La conversación culminó con una profecía del maestro: «Latacunga será un faro de cultura y ciencia para el país». Sus palabras resonaron como una invitación a creer en la capacidad transformadora de los proyectos que combinan visión, pasión y compromiso. Nelson Román sigue inspirando no solo con sus cuadros llenos de misticismo, sino también con su fe en un futuro donde el arte, la ciencia y la humanidad caminen juntos hacia un horizonte luminoso.